La administración
del Principado de Asturias, a través de la Consejería de Presidencia, está
poniendo en riesgo la seguridad de los ciudadanos asturiano, de los trabajadores y del correcto funcionamiento de las instalaciones de la administración con RECORTES en los
servicios de Seguridad que afectan al 50% del personal contratado en la actualidad
que ven peligrar sus puestos de trabajo por los caprichos del Director General
de Justicia e Interior.
El Consejero de
Presidencia se ha permitido el lujo de decir que el despido de los más de 90
vigilantes que trabajan para el Principado es “ Un cambio técnico”.
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