Rueda de Prensa FeS UGT Asturias sobre Ley de Seguridad Privada, 17 de diciembre

Fermín de Con, secretario general de FeS UGT Asturias

“Respetamos el debate ideológico que se suscita en cuanto a si determinadas materias deben ser privatizadas o no, pero no estamos de acuerdo con que se haga desacreditando a los profesionales de la seguridad privada”

“Es falso lo que se está diciendo sobre la falta de formación de los vigilantes”

Los requisitos básicos para poder ejercer como vigilante o guardia civil son los mismos. Lo que cambia es que los funcionarios deben aprobar una oposición publica, mientras que los vigilantes, realizan su formación en centros homologados por el Ministerio del Interior. Allí  realizan una prueba teórica y una serie de ejercicios físicos, supervisados directamente por la Dirección General de Policía. Posteriormente tienen que reciclarse anualmente así como recibir  formación adicional y ejercicios de tiro obligatorios, que, si no superan, puede significar la retirada de su habilitación profesional. Por otro lado, para acceder a los puestos de escolta y vigilantes de explosivos deben hacer otras pruebas y dependiendo del destino que tengan asignado, también tienen que tener una  nueva formación”.

“Los vigilantes siempre hemos realizado nuestra función en la calle”

“La ley vigente, aprobada en 1992, ya permitía a  los vigilantes detener, identificar y realizar registros en la vía pública. La nueva ley únicamente ampliar el ámbito competencial de los vigilantes que podrán desarrollar en determinadas condiciones en la calle. Pedimos que se dé  una mayor protección jurídica que les permita desarrollar su labor con total garantía, es decir un reglamente en el ejercicio de sus funciones”.

José Manuel Fernández. Responsable de seguridad de FeS UGT Asturias

“El sector de la seguridad pública merece un respeto”

     “No entramos en la discusión entre lo público o privado, pero todos podemos defender nuestro gremio respetando al que tenemos en frente. Estamos siendo despreciados por los medios, los políticos”.

“La nueva Ley de Seguridad Privada nos parece incompleta”

   “Los vigilantes hemos sido sido agentes de la autoridad desde siempre, condición que eliminó la ley de 1992. La nueva ley ampara esta condición en la mínima expresión ya que sólo la contempla cuando los vigilantes comparten función conjuntamente con la Policía Nacional, por ejemplo, en campos de futbol  o con la Guardia Civil en aeropuertos . Nos parece irrisorio que hoy en día los profesores, médicos, sean agentes de la autoridad en sus centros de trabajo  y que nosotros que nos dedicamos a la seguridad, no tengamos ese amparo. Sí es cierto que se amplían competencias en cuanto a nuestra función en  los centros penitenciarios, donde a partir de ahora, podremos desarrollar la seguridad periférica y el control de accesos. En ningún caso se cuestiona la labor interna en el interior, que pertenece al funcionario de prisiones. En los centros de menores ya hace más de 20 años que los vigilantes realizan tareas de vigilancia tanto interna como externa".